Hola, Eresma. Ando últimamente muy apartado de vosotras…tal vez lo sepas ya pero he decidido , no sin dolor, que mis fines de semana no pueden estar al servicio de los corredores por muy amigos que sean: y si no me dedico a formas alternativas de enriquecer mi tiempo libre, éste terminará empobreciéndome.
Supe lo del repentino y desgraciado mal que puso tu salud en jaque… y ahora sé que has dado un paso adelante muy importante saliendo victoriosa…
Y con todo ello, no pude evitar acordarme de aquella penúltima vez que nos vimos, en aquel junio de 2005, en la que os acompañé, a lomos de mi caballo de acero con pedales, en ese camino desde colmenar a tres cantos, en aquelos 100 km. en 24 horas…
… con miles palabras y risas, por entre esas choperas a la vera del arroyo, esa cañada bañada por las últimas luces del día.
Eresma: me acuerdo aún muchas veces, y me acordaré, de tu pundonor para seguir y llegar en solitario, con la compañera ya desafortunadamente retirada en el km. 86, con ese cansancio que nunca te echó para atrás y que sólo, ocasionalmente, te apartó alguna vez a un lado del camino para reponer fuerzas, para sacarlas de algún lugar de tu espíritu de luchadora, donde permanecían guardadas para llevarte al kilómetro cien y con ello a la alegría inmensa.
Los cien siguen adelante con el paso de los años y, dos años después, una nueva comitiva emprendió hace dos semanas la marcha por esas cañadas de la cuenca alta del manzanares… Unos que repiten, otros que toman el relevo…otros que vuelven…
… otros que vuelven…
… quien te escribe: este año, como esas tormentas estivales que apenas avisan, ha vuelto.
Ese sábado 9 tomé la salida. Ya lo ves… Ahora me tocaba a mí caminar en esos cien. Es sorprendente, lo sé, es casi un producto de una casualidad gestado en un tablero de billar.. Y por una serie de avatares, ha terminado en una carambola… Esta vez no iba a ser el pastorcillo: sólo iba a ver mis piernas tirando de mí… únicamente yo y mis pensamientos.
Y el último camino por recorrer este año, auque estaba programado para hacerse al revés… coincidió con ese tramo que pedaleé a vuestro lado, acompañando vuestro caminar, hace dos años.
Esperaba no desfallecer, eresma.: guardé fuerzas con inteligencia porque quería llegar hasta esa etapa final del camino,
Y cuando, después de una noche de perros llegué entero a ese momento del tramo final, el Arroyo de la Tejada, me acordé de esa tarde de hace dos años y, en honor a tu lucha, y premeditadamente, te lo quise dedicar.
Caminé firme y decidido, cruzando las corrientes de agua sin vacilar y siempre con la mente dispuesta a no desfallecer, del mismo modo que tú en aquellos cien, igual que tú siempre.
No pude dejar escapar ninguna lágrima al llegar a la meta, porque de hecho para mí esos cien no son el final de un camino. NI para mí… ni para ti hay final para ningún camino. todos los caminos siguen hacia delante, y además pasan por miles de sitios.
Va por ti, Eresma: Por tu lucha, y por tu fuerza, mi edición 2007- kilómetro 88 en adelante. Por que puedas saborear la vida muchos años.
Manuel
…¿La noche anterior? sí, había sido de perros, pero en mi recuerdo queda incluso el encanto de la fuerza de la naturaleza desatada, y el encanto de mi propia naturaleza, por no dejarme naufragar.
Edición 12+1 de los cien, 12+1 representaciones en el teatro
6 comentarios:
Bonita dedicatoria para Eresma, Greyecillo.
Espero que fuera lo que fuera lo que le pasó, siga feliz y luchadora en todos sus caminos.
Besitos.
Todo un detalle por tu parte acordarte de una amiga que por lo que ve ha pasado algún mal momento.
Esos 100 kms. dan para mucho, para momentos buenos y para no tan buenos, pero los que recordaremos al final serán siempre los positivos y tú esos últimos 12 kms. seguro que no los olvidarás en la vida.
Un abrazo.
En los 100km hay algo que no se puede explicar, pero a mucha gente le llega de maneras diferentes. Yo alcancé ese momento y mi percepción de la vida cambió.
Y esos tramos en los que nos sentimos morir son los que recordamos con más cariño.
Un abrazo, Germán.
¡Jode! qué guapa tu dedicatoria para una luchadora del camino y de la vida, según nos dices, también.
No sé como estará tu amiga en estos momentos, ni siquiera si habrá podido leer esta bonito regalo adornado por palabras tan tiernas hacia ella, pero tanto, si sus ojos disfrutan de este texto, como si sus oídos escuchan el relato, o si, ni una, ni otra de las posibilidades se cumpliera, simplemente por el hecho de dedicar y recordar a una persona de esta manera, hará que cómo si un Scrabble fuera, no sea ya Eresma….sino ¡Eres más….! Y en tu imaginación queda añadir, sumar y aumentar el número de adjetivos para ella.
Un abrazo.
Ps. Ha estado mú chulo….ya puedes ir con ese paso firme (aunque sea en blanco y negro) que demuestras en la foto a por tu quetuerce función, obra o entreacto.
Escribís muy hermoso Grey, ya van varias cosas que leo tuyas y transmiten algo especial...
Un beso!
Gracias por uniros los cinco a esta dedicatoria con vuestras palabras… es especialmente valioso sabiendo que varios tenéis esta misma edición 2007 en vuestras piernas y en vuestros corazones y más especialmente aún tratándose de vosotros que la mayoría nunca antes habías recorrido esos caminos -o… ¿debería decir “corrido”, más propiamente…?
Syl… te lo puedo confirmar: últimamente está prácticamente ilocalizable en el teléfono de su casa… no para: eresma sigue fluyendo. No sería de extrañar que incluso ni se haya llegado a sentar aún en el ordenador para leer mi email… esas mismas palabras.
Krisma, recuerdo cada kilómetro de esos cien… Yo no tuve momentos malos, no llegué a tenerlos… a lo sumo fueron “incómodos” pero fueron mucho antes de esos doce últimos. Y al final incluso los momentos incómodos los recuerdas –y seguro que tú más que yo- como un paso más, con la gran sensación de haberlos superado y habiendo extraído lo mejor de cada uno de ellos.
German..las tuyas son unas palabras con las que estoy muy familiarizado… las corroboro. Porque yo también las utilizo para describir mi primer cien, allá por el año 2001.
Josemanuel, sabes que mi paso a veces se vuelve vacilante y tambaleante… los golpes del día a día son, sin embargo, capaces de desestabilizar mi firme caminar pero, habrá 12+2 pronto… disfruta (disfrutad) el entreacto entretanto.
Ella es eresmás… yo también lo pensé mientras escribía su nombre…
Acomodador, please, una butaca en primera fila para anita.
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